Thursday, 17 September 2015

Derecho e izquierdo en imágenes


Acabo de subir esta imagen a la portada de este blog. La imagen hace alusión a los dos hemisferios del cerebro, uno racional (el izquierdo) y otro creativo (el derecho).

Paradójicamente, creo que la idea es meterle mas imágenes a este blog, para ver si así me puedo poner a escribir.




La imagen la encontré buscando "derecho e izquierdo" en google, en este sitio: http://liceopinoverde.edu.co/~site003/node/1050

La teoría argumentativa del razonamiento

Dan Sperber propone una nueva perspectiva sobre cómo conoce y comunica el hombre las ideas. En lugar de una función individual, señala, el razonamiento tiene una función social, específicamente argumentativa. Bajo este esquema, no hay argumento sin sociedad.

Así las cosas, transmitir información supone que el sujeto pasivo tiene una capacidad para discriminar conclusiones irracionales. Si el argumento no contiene información razonable, sus conclusiones serán desechadas.

Convencer al otro (o razonar con el otro) depende de la manera en cómo presentamos la información, es decir, de cómo argumentamos.

Si Aristóteles creía que el hombre es un animal político, lo es, diría Sperber, porque puede argumentar.

El razonamiento es realmente un arma para ganar argumentos y para ser cuidadosos cuando otros intentan convencernos. La verdad no está necesariamente presente en ese ejercicio. Sin embargo, si lo que busacmos es la verdad, ésta no se prueba por sí misma, sino con argumentos. Creemos que Gary Gutting lo describe más claramente:

"The important practical conclusion is that finding the truth does require winning arguments, but not in the sense that my argument defeats yours. Rather, we find an argument that defeats all contrary arguments. Sperber and Mercier in fact approach this philosophical view when they argue that, on their account, reasoning is most problematic when carried out by isolated individuals and is most effective when carried out in social groups."

Más sobre este tema aquí.

Y sobre Hugo Mercier, el otro co-autor de esta teoría, aquí.

Y sobre Gutting aquí.


*Esta entrada la escribí en otro blog en junio de 2011. 

Estrategia de litigio


Llevo un rato trabajando en el caso Comunidades Europeas – Productos derivados de las focas. Voy a ir dejando algunos apuntes y observaciones.
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Noruega y Canadá permiten la cacería y venta de productos derivados de las focas pero han adoptado regulaciones que incluyen estándares que garantizan que la cacería se lleve a cabo de una manera “humana”. 
La Unión Europea alegó que no existía manera de garantizar una cacería humana de focas, porque debido a las características del polo norte, toda cacería de focas es cruel. Al hacer esto, su estrategia fue la de descartar el uso de estándares de Canadá, Noruega o de donde fuera, inclusive internacionales, para permitir la caza de focas. Con esto la UE logró que la cuestión de la cacería de las focas estuviera girando alrededor, de otro tipo de estándar o reglas que funcionaban como estándares, es decir, alrededor de alguna de las tres excepciones (inuit, GRM o viajeros).

Cuando la Unión Europea logró que el Órgano de Apelación desestimara  los argumentos de Canadá y Noruega respecto al uso de sus estándares para asegurar una cacería humana, la UE obtuvo una gran victoria parcial, pero igual perdió el caso. ¿Entonces, fue una buena estrategia de litigio?  ¿O fue una victoria pírrica? 


Espero volver a esto con una respuesta.

Thursday, 4 June 2015

Gas lacrimógeno, SIDA e internet: las manifestaciones en contra de tratados comerciales



“De vuelta a la Batalla en Seattle pero sin el gas lacrimógeno” (Back to the Battle in Seattle but without the teargas). Es el título del artículo de Alan Beattie en la versión impresa del Financial Times del 16/17 de mayo  de 2015. Sin duda, este fue un título más sexy que el que apareció en la versión online “Las tribus están encerradas en la batalla sobre los acuerdos comerciales” (The tribes are locked in battle over trade deals).

Comentó el tema del título porque ciertamente desde 1999, año en que se llevó a cabo la tercera Conferencia Ministerial de la OMC en Seattle, las manifestaciones anti-OMC han bajado de tono y de intensidad. En la arena pública, la “Batalla en Seattle” probablemente ha sido la prueba más dura para el comercio internacional. Confrontó grupos antiglobalización con la policía local y sin duda el uso del gas pimienta por la policía estigmatizó a la Conferencia Ministerial de Seattle (o la “Ministerial del gas lacrimógeno”, como le llamó algún periodista/manifestante).

En las calles, el resultado fueron duros enfrentamientos, lamentos y denuncias sobre los abusos de la autoridad policial. En los cuartos de negociación, sin embargo, se dice que nada se detuvo e incluso hubo avances en las negociaciones comerciales (G Horlick, «Reactions to Seattle. The Speedbump at Seattle», Journal of International Economic Law 3, n.o 1 (1 de marzo de 2000): 167-173, doi:10.1093/jiel/3.1.178.) En todo caso, el propio Horlick admite que las manifestaciones tuvieron un efecto psicológico en algunos negociadores de ciertos países. Ciertamente, no creo que los Miembros de la OMC hayan cerrado los ojos ante lo sucedido en las calles. Prueba de ello es que no hubo una Declaración Ministerial, como suele hacerse al final de estas reuniones bianuales.

También hay que decir que las manifestaciones, si bien eran en contra de la OMC, en realidad representaban un síntoma del rechazo más general (de los manifestantes) en contra de la globalización. Desde entonces, no ha habido un enfrentamiento de esta magnitud ni con esa resonancia mediática, y la OMC ha dejado de ser el objetivo de los manifestantes y las ONGs, probablemente porque la Ronda de Doha ha dejado de avanzar.

En el 2000, el tema de acceso a medicamentos-SIDA-Sudáfrica sin duda causo un revuelo mediático y legal. Hubo manifestaciones importantes para defender el derecho a la salud. Aquí dejo el tema,  pero solo advierto que no hubo gas lacrimógeno.
  
En 2012, el megáfono de los manifestantes se levantó en contra del A.C.T.A. (Anti-Counterfeiting Trade Agreement o Tratado de Comercio contra la Falsificación), un tratado sobre derechos de autor y monitoreo de actividades en internet, negociado en secreto (filtrado por Wikileaks). La campaña pública anti-ACTA utilizó las calles y el internet. Tuvo efecto (acaso porque los potenciales afectados tenían medios de comunicación más efectivos…el internet), y la presión pública obligó a que el ACTA fuera rechazado por los Congresos de algunos de los países negociadores. 


En 2015 como señala Alan Beattie en su artículo, los inconformes han encontrado nuevo ímpetu en contra del TPP y el TTIP. No escribiré aquí y ahora sobre este tema que tiene muchas texturas y merece profundidad. Por lo pronto, mejor será leer el artículo de Beattie.


Así que como vemos, después de Seattle han habido manifestaciones importantes, que han alimentado el debate público de temas que normalmente no salen de los cuartos de los negociadores. Y afortunadamente, en la calle no ha habido más gas lacrimógeno.


Sunday, 17 May 2015

The WTO at 20: Taking Stock and Challenges Ahead



6 de mayo de 2015
Londres, Conferencia sobre los 20 años de la OMC.

La Society of International Economic Law junto con el IEEL de Georgetown y el British Institute of International and Comparative Law organizaron la 15ava Conferencia anual sobre la OMC, titulada esta vez, con motivo del cumpleaños número 20 de la OMC, “The WTO at 20: Taking Stock and Challenges Ahead”. Ante el llamado para presentar documentos de investigación, tuve el honor de ser aceptado para presentar el tema “Defence of multiple policy objectives before WTO Courts: EC-Seals or the false dilemma between protecting Inuits or seals”.

El evento me brindo una oportunidad excepcional para compartir la mesa de discusión con Lorand Bartels, Jan Yves Remy, Andrew Lang y Gracia Marin-Duran. Todos ellos, gente de fina estampa, reconocidos globalmente. En el auditorio se encontraban otros ponentes y p'ublico especializado, gente brillantísima, del calibre de Gabrielle Marceau (co-organizadora del evento).

Ciertamente, un académico joven como yo se siente abrumado por la presencia de tanto personaje celebre. Para ponerlo en términos futboleros, me sentí como en mi primer partido de la Champions League. Ya me había tocado presentar en la OMC en Ginebra, en Brasil y Argentina, pero este día tuvo un sabor especial. Tal vez porque es mi primera presentación desde el accidente que intento' arrancarme la pierna. Así que hoy volví al campo de juego, por lo menos unos minutos, después de mi lesión. ¡Y vamos por los 90 minutos!

Desde antes de mi caída en el volcán traía a las focas y los esquimales en la cabeza. Llevo dos años trabajando de manera intermitente pero muy intensa en el caso. El evento me brindo una oportunidad excepcional para conocer los puntos de vistas de los abogados que representaron a Canadá, Noruega y la Unión Europea, así como de los académicos más brillantes del mundo. Mi investigación será enriquecida con lo acontecido este día. La meta es publicar un paper en los próximos meses.

Además de lo profesional, me llevo a casa varios detalles. La sonrisa de Jan Yves, la amistad de Andrew Lang y la inagotable sabiduría de Gabrielle Marceau. Felicito a los organizadores, y agradezco a Mark Herlihy y Joost Pauwelyn sus atenciones.